La paz solamente se podrá lograr cuando dejemos
de ser indiferentes al dolor de los demás.
Hecocu
EL MANCEBO Y LOS PERROS
Por Héctor José Corredor Cuervo
Caminando por las calles invernales
bajo el palio gris de pertinaz neblina
un mancebo pasea unos animales
mientras las penurias a su honor dominan.
En la sarta él lleva los lustrosos canes
arreglados como reinas de belleza
de millonarios que no sienten afanes
ni palpan el sufrimiento por pobreza.
En su rostro se desgrana la amargura,
por ser principal actor de la tragedia,
al tener que convivir con la basura
ocultando la verdad de su comedia.
En las casonas de algunos potentados
él contempla el exceso del alimento
y comparte con los perros los sobrados
para llevarle a hermanos el sustento.
Quien contempla los canes y al mancebo
De inmediato sacará esta conclusión:
“Que hay humanos que tienen vida de perro
mientras hay perros que gozan de atención”.
22 enero de 2001. Poema inspirado por un muchacho que pasea perros en la calle y quien por necesidad comparte el concentrado de los animales y el sobrante lo lleva para alimentar a su familia
No hay comentarios:
Publicar un comentario