viernes, 2 de abril de 2010

GUAJIROS



Por Héctor José Corredor Cuervo

Cerca del mar en una soledad eterna
bajo el domo azul de singular pureza
habitan los Guajiros con alma enferma
en medio del abandono y la tristeza.

Son indios puros de raza y colombianos
que defienden a su tierra con valor,
que impiden la deshonra de los hermanos
y que prefieren la muerte con honor.

Son guerreros como Prudencio Padilla
que liberó a la patria de odio y terror
aniquilando en Maracaibo la flotilla
del sanguinario, del tirano y opresor.

Son orgullosos de la sangre de su raza
que cual torrentes les llega al corazón
la que los impulsa a defender con casta
sus rancherías, su pueblo y su región.

Son compañeros y siempre inseparables
el burro, la cabra, el arma y el chinchorro
los que llevan por las trochas naturales
para buscar agua como el gran tesoro.

Son las arenas que se las lleva el viento
el testigo del dolor, de la agonía,
del sufrimiento y del continuo lamento
que la hambruna deja allá en su ranchería.

Son los Guajiros serenos y valientes
los que sufren el dolor de su tragedia
ante miradas de muchos dirigentes
que no ven su situación ni su miseria.

Duermen las siestas en un colgante lecho
en ramadas de muy poca protección
mientras su fiel compañera está al acecho
del enemigo que ataca con pasión.

Jamás temen a las balas asesinas
de los cobardes que emboscan el camino
ni al accionar de las tenebrosas minas
que son sembradas para cambiar destino.

¡Oh!, indio de mi tierra y latinoamericano
que vive cual basura en completa orfandad
quiera Dios que se sensibilice el ser humano
para que las tribus no vivan más de caridad.

¡Vamos Guajiros!. ¡Que orgullo que vivan en mi patria!

19 de marzo de 1984. Celebración de bicentenario del nacimiento del Almirante José Prudencio Padilla.

2 comentarios:

Irguheva dijo...

Hola Héctor,es un placer pasear por tu blog y leer este poema maravilloso sobre Colombia, y fue un honor compartir contigo aca en Tijuana en el congreso,felicidades Señor de las letras.
un beso.

HÉCTOR JOSÉ CORREDOR CUERVO dijo...

Estimada amiga:

Fué para mi un gran placer conocerte en Tijuana. Hoy doy gracias a Dios por poner en mi camino gente maravillosa como tu. Gracias por tu comentario. Espero me sigas visitando e invites a todos los amigos a que lo hagan. Abrazos.